El 19-J: nuevo 15-M

Ha pasado más de un mes desde que comenzaron las protestas del 15-M en España. A día de hoy, 19-J, la gente ha salido a las calles de toda Europa y más allá para seguir protestando por el manejo político de la crisis económica, esta vez contra el Pacto del Euro en particular. Parece que las manifestaciones van cuajando poco a poco en la mente de los europeos.

Las protestas principales siguen en España y en Grecia. Llevaban ya meses en las calles debido a la crisis y a las medidas de austeridad propuestas entre la UE y el FMI y aceptadas por el gobierno heleno, y había violencia hasta que comenzaron a inspirarse por el pacifismo demostrado en España. Por desgracia, la situación volvió a violentarse la semana pasada cuando el primer ministro Papandréu anunció que remodelaría el gobierno pero seguiría como con el plan de las medidas de austeridad. Por otro lado, ha cedido en parte al proponer un referéndum para otoño con el fin de introducir cambios políticos en el país.


Sin duda, no es de extrañar que haya más griegos que españoles en las calles y que estén más furiosos. Al fin y al cabo, el rescate financiero de Grecia significa que los helenos deben ciento cincuenta mil millones de dolares (150.000.000.000$) a la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, y quizás se necesiten cien mil millones más.

En España también hubo violencia, pero ha sido mucho más unilateral. Tras la "limpieza" en la Plaza Catalunya, les tocó a aquellos en el Parc de la Ciutadella, también en Barcelona. El día 15 de junio quisieron acampar durante la noche más de 2000 protestantes para seguir impidiendo el paso a los diputados que intentaran entrar en el parlamento catalán. Además de la brutalidad policial, entre los que manifestantes que provocaban la violencia se encontraban policías vestidos de paisano, lo cual ha sido oficialmente negado a pesar de las pruebas visuales. Además, la sesión parlamentaria acabó por llevarse a cabo con normalidad y los recortes económicos propuestos fueron aprobados por CiU y PP.

Hoy es el "19-J" para los manifestantes europeos, concretamente contra el Pacto del Euro, que llevará a una serie de medidas para "fomentar la competitividad y afrontar la crisis de la deuda". ¿Qué hará? Asegurará que el pueblo pague la deuda nacional en un plazo, lo que significa que el pueblo llano se empobrecerá mientras el mundo financiero se recupera. Ya está ocurriendo en Grecia y les seguirá Portugal, España e Irlanda.

La muchedumbre se ha concentrado en un centenar de puntos por toda la supranación. En París, la policía ha detenido a más de un centenar de indignados y en Bruselas la policía belga ha cargado contra los manifestantes con gases lacrimógenos.

El recuento de las convocaciones en España es incompleto y preliminar, un baile de cifras probablemente no muy acertadas, ya sea infravaloradas o sobrevaloradas: en Jaen 1.000, en Lleida 2.000, en Vitoria 2.500, en Donostia, Murcia, Valladolid y Cadiz unos 5.000, en Málaga y Alicante 10.000, en Bilbao 12.000, en Tarragona 15.000, en Granada 18.000, en Sevilla 20.000, en Las Palmas entre 25.000 y 30.000, 30.000 en Zaragoza y 45.000 en Gijón.


Según la policía en Barcelona se han reunido 75.000 y según El País 98.000. Mientras tanto, se estima a 80.000 en Valencia. Cifras realmente impresionantes. Según la policía madrileña, ha habido entre 35.000 y 45.000 concentrados, lo cual ya superaría el máximo anterior, pero es que además las estimaciones más recientes de los manifestantes afirman que el número es mucho mayor; algunos dicen que se acerca a las 150.000 personas. Sea cual sea el caso, el número de asistentes no deja de crecer. Esto supera con creces a los 28.000 que hubo el día antes de las elecciones y se acerca lentamente a la mayor concentración reciente en Grecia, que el 5 de junio reunió entre 300.000 y 500.000 atenienses.

El total de manifestantes en toda la nación no está nada claro, pero pronto habrá una aproximación. La cuestión es que ha habido cientos de miles de personas por todo el país y no ha habido ningún signo de violencia. La última vez que hablé de lo que estaba ocurriendo en Europa creía que todo empezaría a disiparse y volvería a estallar en la próxima gran concentración pan-europea en octubre. Por lo visto estaba equivocado: si bien el movimiento sigue sin tener ideales muy unificados ni está libre de propuestas románticas inútiles, el movimiento por una "Democracia Real Ya" sigue en pie y más fuerte que nunca.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Escribe tu comentario aquí.