Los genes rara vez se tratan de inevitabilidad, especialmente en lo que concierne a los humanos, el cerebro o la conducta. Se trata de vulnerabilidades, propensiones y tendencias.Pues bien: un conocido doctor canadiense especializado en la adicción llamado Gábor Máté lleva años investigado el asunto en lo que podríamos llamar 'trabajo de campo' y se ha fijado en que, si bien dichas tendencias naturales existen en algunos de sus pacientes, todos ellos han tenido alguna clase de 'deficiencia infantil' de mayor o menor gravedad en su hogar y/o entorno. No se trata de causas genéticas, sino 'sociales'. La causante primordial es una formación deficiente.
En conclusión: mezclamos un poco de conflictos domésticos y problmas económicos con un barrio no muy recomendable y un mundo que empieza a no serlo tampoco y lo que resulta es un cóctel perfecto para el desastre, ya sea para la adicción o para otra clase de conducta errática. Esto no es una novedad ni debería ser una sorpresa para la mayoría, pero por desgracia lo será para muchos.
De todas formas, siempre es bueno que las obviedades sean testadas científicamente. Por ejemplo, ¿sabéis eso que se suele decir de que los homófobos lo son porque están inseguros de su propia sexualidad? Pues bien: ¡Obviedad testada! También hay otros punto de vista, menos metódicos pero más divertidos. Admitídlo, es material de primera para acallar a la mayoría. Excepto a los que están meramente cegados por el fanatismo religioso, por supuesto. Me temo que esa deficiencia infantil no la puede curar ni el Dr. Gábor Máté, al que por cierto os recomiendo que investigéis un poco, ya que le han hecho varias entrevistas informativas y ha escrito artículos y libros muy interesantes.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Escribe tu comentario aquí.